Pandora, las mujeres y los traficantes de sueños

Maravilloso. Así es el nuevo espacio que la librería Traficantes de Sueños estrenó el pasado 15 de diciembre en la castiza calle de Duque de Alba 13, entre la plaza de Tirso de Molina y el comienzo de El Rastro de Madrid. Un espacio «colectivo, abierto a la ciudad, que acoge multitud de presentaciones, proyecciones, reuniones, talleres y debates».

Se trata de un espacio distribuido en dos plantas, acogedor y agradable, lleno de luz, de libros y de… ¡niños! ¿Cómo? ¿De niños? Sí, porque el pasado sábado 7 de  los niños eran los protagonistas indiscutibles de Traficantes de Sueños. Aproximadamente un centenar de personas de 0 a 100 años se dieron cita en una de las salas preparas para eventos de la segunda planta de la librería.

Allí algunas de las integrantes de Pandora Mirabilia, cooperativa formada por mujeres, con mirada feminista y multidisciplinar, presentaron Un cuento propio. Historias para escuchar, heroínas por descubrir, un doble disco en el que, a través de los cuentos y la música se presentan las vidas de siete mujeres a las que la Historia no ha tenido lo suficientemente en cuenta.

Es el caso María Elena Caso, una científica mexicana que fue una de las grandes científicas de la biología marina; Alice Guy, una pionera del cine; Miriam Makeba, cantante y activista anti-aprtheid; Valentina Tereshkova, la primera mujer astronauta; Gaura Devi, activista del movimiento ecologista Chipko; las maestras de la II República española; o Trótula de Salerno, pionera en ginecología y obstetricia.

«Estamos abrumadas e impresionadas», comentaba Marta Monasterio al ver cómo la sala se quedaba pequeña ante la afluencia de niños y no tan niños. Ella e Irene García fueron las encargadas de presentar este proyecto, posible gracias a una exitosa campaña de crowdfunding y nacido de la voluntad de contar cuentos no sexistas y de considerar este género literario como «una herramienta de crecimiento individual y colectivo». «Se trata de cuentos para enseñar a relacionarse, cuentos para bailar y soñar, siete asombrosas historias basadas en la vida de mujeres reales», explicaba Irene.

Tras escuchar el cuento de Malena Caso y Alice Guy a través de las fabulosas voces de Laura Corcuera y Antón, Camila Monasterio trajo a estas mujeres al mundo real a través de la música. La música, que hizo las delicias de los más pequeños, que se amontonaban sentados en el suelo. Más atrás, padres y abuelos, cantaban las canciones de Un cuento propio. Historias para escuchar, heroínas por descubrir. Una auténtica fiesta que demostró, una vez más, que las librerías son mucho más que espacios para vender libros.

 

Por  Patricia Magaña

Uso de cookies

Este sitio web utiliza cookies para que usted tenga la mejor experiencia de usuario. Si continúa navegando está dando su consentimiento para la aceptación de las mencionadas cookies y la aceptación de nuestra política de cookies, pinche el enlace para mayor información.

ACEPTAR
Aviso de cookies