El pasado viernes 10 de febrero se presentó en la madrileña librería Cervantes y Compañía la reedición del libro de cuentos Velocidad de los jardines, de Eloy Tizón, editado por Páginas de Espuma. A pesar de que el lleno hasta la bandera fue un hecho palpable, el ambiente que se evidenció en el evento fue un tanto familiar, como un reencuentro de viejos amigos que se juntan para celebrar las grandes glorias pasadas. Los 25 años de la obra, clave en la trayectoria como escritor de Eloy Tizón, bien merecía dicho encuentro.
Para quien suscribe estas líneas, que aprendió a leer con Tizón como alumna en la Escuela de Escritores de Madrid, este acto supuso además un punto nostálgico, una de esas emociones que transmiten los cuentos de Eloy, repletos de una belleza triste que te atrapa en una vorágine de detalles breves e imágenes vivas. Tizón presidió el evento acompañado por Juan Casamayor, editor de Páginas de Espuma. Con la complicidad propia de una pareja de cómicos, Casamayor y Tizón mostraron a los presentes que esta reedición no solo responde a un homenaje a uno de los mejores libros de cuento españoles contemporáneos, sino también a la conjunción de un proyecto personal entre autor y editor que augura una proyección futura prometedora para ellos y para nosotros, sus lectores.
Páginas de Espuma ha reeditado Velocidad de los jardines con una edición en dos formatos, normal y especial limitada, donde el talento de Eloy Tizón se mezcla con las fotografías de Lisbeth Salas, que ha retratado las páginas originales de la obra. Además, la editorial ha organizado una exposición con dichas fotografías, que se podrán ver en el sótano de la librería Cervantes y Compañía hasta el 28 de febrero.
Carta a Eloy Tizón
Casamayor fue el responsable de abrir un acto que contó con el acompañamiento musical de Guillermo González al violonchelo. El editor dio la bienvenida a los presentes a un “viaje en el tiempo”, hasta 1992, cuando la obra vio la luz. “Es un libro que deslumbra en escuelas de escritores y barras de bares”, afirmaba Casamayor en la lectura de una emotiva carta a Eloy Tizón donde hizo un recorrido por la trayectoria profesional de ambos. El escritor, por su parte, quiso agradecer a los presentes, a los lectores, al equipo de Páginas de Espuma y a la “cabezonería aragonesa de Juan” que son, según él, los que han hecho posible esta nueva edición de la obra.
En su intervención, Eloy recordó su pasado como dibujante de mapas para el ejército y el parque que hizo su “oasis” por aquellos años, donde comenzó a escribir los cuentos que componen la obra. Curiosamente, la misma época y el mismo parque en el que pasaba la adolescencia el editor. “Compartimos un jardín y ahora un libro”, concluyó el autor. Una suerte de casualidades que parecía culminar el viernes en la librería Cervantes y Compañía.
Para cerrar el acto, la escritora y actriz Elena González del Pino premió a los presentes con la lectura de dos fragmentos del libro, correspondientes a los cuentos Escenas de un pic-nic y Cubriré de flores tu palidez, y que en su cuerpo y voz encontraron un material conductor ideal que hizo visibles, por unos minutos, los jardines particulares de los protagonistas de la obra.
25 años de jardines veloces
Como confesó el autor, el evento conmemoró a la vez la primera presentación y el 25 aniversario, ya que Velocidad de los jardines no tuvo en su día una presentación como tal. Esta obra es una muestra clave del género en nuestro país, que ha puesto sobre la palestra la calidad de Eloy Tizón como escritor de cuentos, refrendada posteriormente con la publicación de Parpadeos (2006) y, sobre todo, con Técnicas de Iluminación (2013).
Velocidad de los jardines es “un libro lleno de vida”, tal y como aseguró Casamayor durante el acto. En el prólogo de la nueva edición, titulado Zoótropo, Eloy Tizón realiza una biografía de la obra donde lo califica de “libro sin término medio: se ama o se odia”. El autor relata, con su estilo personal, como ha sido el propio libro quien “con la conspiración de los lectores” ha ido poco a poco ocupando las estanterías de los “iniciados”, motivando la necesidad de esta nueva edición conmemorativa que ha sacado Páginas de Espuma.
Quien tenga el placer de encontrarse por primera vez con Velocidad de los jardines, descubrirá en sus páginas personajes que se debaten entre la banalidad y el prodigio, con una escritura llena de sabores y olores, en palabras del propio autor. Los que aprovechen esta reedición para volver a leer la obra podrán analizar más profundamente los mundos sugerentes que emanan de la pluma tranquila y triste de Tizón, melancólica y vivaz, hermosa y antigua. Quizás su pasado como dibujante de mapas le permitió mapear también estos jardines con vivencias y detalles tan rápidos como lentos. 25 años bien merecidos.